lunes, 7 de agosto de 2017

Guatemala - Honduras 2017 (2º Parte)

6º Día. Chichicastenango – Mercado – Nebaj 

Visitamos el más conocido de los mercados indígenas mayas en Chichicastenango. Este impresionante mercado tiene su lugar clave en la plaza donde los "Masheños", como son conocidos los habitantes de Chichicastenango, desarrollan la vida comercial.

Merece acercarse por la noche y ver como empiezan el día antes a montarse los puestos.


Para mí, este mercado tiene menos encanto que el de Solola. Mientras que el mercado de Solola es únicamente para los Guatemaltecos, el de Chichicastenango tiene  muchos puestos de suvenires para los turistas, es decir para mí.


En medio del mercado hay una pequeña plaza para comprar frutas.


Destaca que el mercado se encuentra situado entre dos bonitas iglesias de paredes blancas. Los retablos y las paredes de las iglesias se encuentran ennegrecidos por las miles de velas e inciensos que se queman dentro del templo como ofrendas a los santos.



La escalera de la iglesia más grande se  cubre de un colorido manto de puestos de flores.


Tras la visita tuvimos un largo traslado hasta la zona de Nebaj. En la última parada técnica antes de llegar a Nebaj aprovechamos para hacernos otra foto con otro autobús.




7º Día. Nebul - Trekking

Este sitio nos sorprendió muy gratamente por sus paisajes. Grandes montañas con bonitos prados verdes. Parecía que nos habíamos trasladado a los Pirineos.

La ruta comienza a partir de la agrícola y montañosa villa de Acul subiendo una cumbre desde donde se se podrá observar el Valle de Nebaj y un precioso paisaje de montañas.

Esta es la hacienda donde pernoctamos durante dos noches.


El amanecer te deja sin palabra.




Pronto empezamos a caminar. El sendero fué de una tres horas y transcurría por una pista ancha.









En esa casita se encontraba Yolanda.


Abajo la villa de Nebaj.



Después nos trasladó nuestro maravilloso conductor Osvaldo en el vehículo al pueblo de Chichel desde donde parte un pequeño sendero a las Cascada de Chichel. En la base de la cascada nos tomaríamos un delicioso bocata  de chorizo.

La subida es por un sendero estrecho.


Algunos tramos están embarrados.


Entre las ramas se empieza a vislumbrar la cascada.



El salto del agua es impresionante.





Después de una corta caminata de apenas 30 minutos llega la hora de la comida.





Hoy ha sido un día de naturaleza exuberante. Una de las cosas que más nos ha gustado es que durante el día de hoy no nos hemos encontrado a ningún turista. Los lugares son auténticos.


8º Día. Nebul - Biotopo Quetzal - Cobán

Ruta por la mítica carretera Transcuchumatana hacia Coban. Espectaculares paisajes de montaña. Antes de detenernos en Coban nos acercaremos a ver el Biotopo del Quetzal, un lugar de conservación protegido administrativamente y también por sus quebradas y selvas, donde si tenemos suerte podremos observar el vuelo de la maravillosa ave.


En la reserva se realiza una pequeña caminata en búsqueda del Quetzal, el ave de Guatemala. 


El paseo es alucinante.




Esta hoja de helecho mide más de dos metros.


En medio del sendero nos encontramos con una Nauyacana Verdinegra, es decir, una víbora verde venenosa. Muy bonita, pero un con un poquito de maldad si te pica.



A falta de Quetzal pudimos ver miles de mariposas.


Y para terminar el trío calavera haciendo como que buscaban al Quetzal.


No hubo suerte, no vimos un Quetzal pero el paseo mereció la pena, eso sí, no os recomiendo comer en la reserva. El plato que nos pusieron fue bastante escaso.

9º Día. Cobán - Semuc Champey - Lanquín

Hoy toca diversión en Semuc Champey, para trasladarnos hasta este punto lo haremos en furogenta descubierta 4x4.


Semuc Champey está constituido por un puente natural de piedra de aproximadamente 500 metros de largo, bajo esta increíble estructura corre tempestuosamente el río Cahabón, mientras, en la parte superior pozas de aguas turquesas, tranquilas y poco profundas invitan a un plácido baño.


Unos cuantos decidimos subir al mirador. Una corta pero intensa subida.





Desde el mirador se observan perfectamente las pozas de agua turquesa.



 


En este punto se observa como el agua entrá con fuerzas por debajo de las pozas, el puente natural de piedra.




Es un auténtico paraíso.



Este es el punto final de las pozas, y por debajo de las mismas vuelve a surgir el río Cahabón


La vuelta la hacemos bajo una fuerte tromba de agua. 


Después de secarnos nos dirigiremos a las cuevas de Lanquin, estas cuevas están incluidas en las leyendas mayas y son consideradas como la entrada al Xibalbá, la entrada al inframundo. Las cuevas no han sido exploradas en su totalidad, hicimos unos trescientos metros plagados de estalactitas, estalagmitas y otras caprichosas figuras naturales formadas a través de los siglos.

Antes de salir observamos como miles y miles de murciélagos salían de la cueva.





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